Hoy, lunes 3 de junio, se celebra el Día Mundial de la Bicicleta, establecido oficialmente por la ONU para reconocer la «singularidad, longevidad y versatilidad» de la bicicleta en sus dos siglos de historia. Este día busca destacar la importancia de la bicicleta como un «medio de transporte sostenible, sencillo, asequible, fiable, limpio y ecológico que contribuye a la gestión ambiental y beneficia la salud», según la ONU.
Importancia y Beneficios de la Bicicleta:
La bicicleta, un regalo popular en la niñez, se ha consolidado como un medio de transporte que ofrece grandes beneficios para la salud y el medio ambiente, sin importar la edad del usuario. La ONU subraya que «los beneficios son mayores que los posibles daños. Realizar cualquier tipo de actividad física es mejor que nada. Mantenerse activo a lo largo del día ayuda a mantener y alcanzar los niveles de actividad recomendados».
La Organización Mundial de la Salud (OMS) hace un llamado a los países para que ofrezcan una infraestructura segura que permita una mayor equidad en materia de salud. La bicicleta y el desplazamiento a pie son esenciales para los sectores urbanos más pobres que no pueden permitirse vehículos propios. Además de ser un medio de transporte económico, estos modos de transporte activo pueden reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, ciertos tipos de cáncer, diabetes e incluso la mortalidad.
Equidad y Sostenibilidad:
La mejora del transporte activo no solo es una cuestión de salud, sino que también puede incrementar la equidad y eficiencia en costos. «Satisfacer las necesidades de estos ciclistas y peatones sigue siendo crucial para solucionar los problemas de movilidad de las ciudades, mitigar el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero debido al crecimiento de la población y mejorar la calidad del aire y la seguridad vial», destaca la ONU.
Compromiso Internacional:
El 15 de marzo de 2022, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución para integrar el uso generalizado de la bicicleta en los sistemas de transporte público, en favor del desarrollo sostenible. Esta resolución resalta la bicicleta como un instrumento de transporte sostenible que fomenta el consumo y la producción responsables, con impactos positivos en el clima.
